Tuvieron que pasar nadamás 17 años antes de que Porsche se subiera al podio de ganadores en las 24 horas de Le Mans, la carrera más importante del World Endurence Championship (WEC). Y si bien hemos sido testigos de cómo los equipos competidores han evolucionados sus autos, esta vez resulta particularmente emocionante ver como los 919 Hybrid de Porsche han dado cátedra de lo que debe ser un auto de estas características, a tal grado de que este espectáculo como tal, conmueve tanto o más que la propia F1 en sus mejores tiempos.

El fin de semana se veía muy prometedor para la casa de Stuttgart, sin embargo, a pesar de que el auto de Porsche literalmente volaba sobre la pista al momento de clasificar, la amenaza de los de Ingolstat aun estaba latente pues el Audi R18 E-Tron estaba a solo dos segundos de distancia, algo que es relativo en la competición y que obedece a diferentes factores. En cuanto a los japoneses Toyota y Nissan, no fue más que un fin de semana para aprender ya que el auto realmente no anduvo tan bien como se esperaba y en el caso de Nissan, el quipo aprovechó para obtener la mejor telemetría posible y ensayarla para alguna otra carrera.

Así que la verdadera batalla se dio entre los alemanes en el transcurso de la madrugada y las primeras horas de la mañana siguiente, con unos Audi R18 sobre esforzados y con bastantes heridas que ya les pasaban factura a causa de las diferentes visitas a pits para cambiar piezas por choques, recargas de aceite, combustible, fallas esporádicas, etc. Mientras esto sucedía, Los 919 Hybrid se alejaban cada vez más ganando mucha comodidad para no exigir tanto a las llantas ya que si bien fueron capaces de devorar desplazarse efectivamente por el circuito, el desgaste de neumáticos se torna más prematuro por lo misma, lo cual implica un serio problema.

El ocaso llegó beneficiando cada vez más al equipo Porsche y aunque la amenaza de lluvia estaba latente, los de Stuttgart ya no contemplaban otra parada más, incluso cuando finalmente la lluvia apareció, el jefe del equipo Audi, caballerosamente se dirigía hacia el box de Porsche para saludar a los virtuales ganadores de las míticas 24hrs de Le Mans. Así pues, el auto #19 piloteado por Nico Hulkenberg, actual piloto de F1, retoma el camino que la marca perdió décadas atrás. Y para los escépticos que piensen que esto no es posible, les informo que Nico es el único en haber logrado esto ya que si bien hubo participantes que ganaron en Le Mans, los calendarios de ambas categorías nunca coincidieron. Sobre los autos y su desarrollo tecnológico, evolución y prestaciones, mejor ni hablamos; sencillamente son de otra galaxia y me atrevo a decir que el espectáculo que actualmente ofrece la F1, esta a años luz de la emoción y sensaciones que nos ha dejado sentir el WEC.