Como habíamos adelantado a principio de año que lo harían , Nissan presentó ayer la nueva versión de su Altima, el cual incluye nueva estilización, la entrada de la versión deportiva SR y mejoras tecnológicas en el área de seguridad.

En seguimiento a la llamada estrategia de «cascadear» el diseño de modelos de mayor rango a los que le siguen, el nuevo Altima toma rasgos estéticos presentes en el recién presentado Nissan Maxima como la parrilla en forma de V, cofre con apariencia hundida, fascias más aerodinámicas y acentos de iluminación LED en los faros frontales.

La parte trasera también ha sido rediseñada al incluir los faros en forma de boomerang presentes también en el sedán de corte deportivo de la marca y una nueva defensa en la parte inferior de la cajuela.

Más allá de un simple ejercicio de reestilización, Nissan presume que sus registros comprueban que el arrastre y peso vehicular se ha reducido a causa de el nuevo paquete de exteriores aerodinámicos.

Una de las mayores novedades en este nuevo Altima es la inclusión de la etiqueta deportiva SR, la cual integra la instalación de un spoiler trasero, exclusivos rines de aleación y faros delanteros con detallado ahumado.

Las llamadas mejoras tecnológicas en seguridad contemplan un catálogo de asistencias a la conducción como lo son los sistemas de prevención de colisión frontal (PFWC), detección de punto ciego a través de radar (BSW), frenado frontal de emergencia (FEB) y una mejorada plataforma de control crucero inteligente (ICC).

El rango de motores va desde la opción con propulsor de 2.5 litros de 4 cilindros y 185 caballos de potencia, hasta la versión que equipa la variante deportiva SR que equipa un motor V6 de 3.6 litros que genera potencia de 270 caballos de fuerza. Ambas mototizaciones estarán asociadas a la transmisión continuamente variable CVT de la compañía.