A la filial de lujo de Honda le encanta causar expectativa y alargar el lanzamiento de sus nuevos vehículos y el caso de tercera generación de la RDX no podía ser la excepción.

Presentada bajo el apellido Prototype, estamos ante la versión final de este vehículo, por que realmente no hay ni un cromo que se pudiera quitar antes de llegar a producción, aun así, la firma japonesa prefiere un primer acercamiento al mercado, para medir la recepción del público.

Así, la renovación de la SUV mediana la firma japonesa nos pone frente a un vehículo con un diseño muy dinámico, elegante y lleno de ángulos, líneas que ya habíamos visto en el TLX y que seguirán llegando al resto de la gama.

El propulsor seguirá siendo un 2.0 litros turbocargado, acoplado a una transmisión automática de 10 cambios, que impulsará las cuatro ruedas mediante el sistema de tracción integral SH-AWD de la marca, que regresa en esta generación a RDX.

Además de este prototipo, Acura también anunció el regreso de las versiones Type-S, que se convertirá en su división de altas prestaciones, y que lanzará un nuevo motor V6 turbocargado, que será exclusivo para uso de la marca (no llegará a Honda).

Mientras que A-Spec se mantendrá como un nivel de acabado con un diseño más emocionante que el resto de la gama, pero sin el nivel de modificaciones deportivas de los Type-S.